Regalo de cumpleaños

Antonio Muñoz Molina

 A veces las cosas pasan por que deben pasar. Esta verdad máxima, la podemos aplicar a la aventura descocada de este blog y una de sus integrantes. Dicen que la victoria es de los valientes y quien no se arriesga no gana. Frases hechas, que ilustran, perfectamente, la historia que indujo a que uno de los escritores mas laureados de nuestro país, concediera una entrevista en la distancia a este humilde blog.
Y esta es la historia: 
"Todo comenzó por un libro que me regalaron En ausencia de Blanca. Me gustó tanto, que le hice una reseña en el blog. Y como me supo a poco, le envié dicha reseña al propio escritor. Además de esto, también le propuse una entrevista vía blog, por aquello de la distancia.
Yo todavía, desde la más absoluta de las ignorancias, no sabía con quién me estaba carteando.
Antonio Muñoz Molina, no tardó mucho en responder. Me anunciaba que no tenía problemas para prestarse a nuestro experimento. Me voy a mi biblioteca, en busca de más cosas de Molina. 
-Me encantó  el libro que me diste. Que bueno es este tío escribiendo. No me cuesta nada imaginarme las cosas que cuenta-. El bibliotecario:  Pero es que ese tío es súper bueno. Es el mismo de “Plenilunio” “Beltenebros” etc.…Además es miembro de la Real Academia de la lengua Española…bla, bla, bla,.." Cuanto más me contaba mi bibliotecario, más mala me ponía yo. 
-¡Ay madre mía en que berenjenal me he metido yo sin necesidad alguna!-"

Pero aquí está la entrevista, como si fuera un regalo a la inocencia, a las ganas de preguntar, a la aventura, a las fuerzas de la buena literatura. Un regalo sin importar las clases,  los estatus , los niveles y las relaciones, solo dos personas desconocidas, con preguntas a un  gran escritor. No es por nada, pero la grandeza se demuestra en estas pequeñas cosas.
Muchas gracias por regalarnos, en este nuestro primer año en antena, esta entrevista.


E.S: ¿Qué tiene la ciudad de N Y que no tengan las españolas?
A.M: Cada ciudad es un mundo, y si un se fija con atención puede encontrar en ella experiencias valiosas. Lo que tiene Nueva York es que es una ciudad de ocho millones de habitantes llegados de todo el mundo. El encuentro de tanta gente distinta volcada en hacer cosas tiene un efecto multiplicador. Para mí tiene la ventaja añadida del anonimato.

E.S: ¿Qué pasa  por su cabeza, cuando una cineasta (ya sea Pilar Miro o  Imanol Uribe) se acerca a usted, para proponerle hacer una película de su novela?
A.M: Esas cosas hacen mas ilusión al principio. Después se ve que casi siempre el director está mucho más interesado en su propia película que en la novela de uno. Pero siempre hay la esperanza de que salga una buena película, claro.

E.S: ¿Qué  tiene que tener claro un escritor cuando esto ocurre? Ventajas y desventajas
A.M: Que el libro es el libro, y la película la película. Cada uno tiene una vida propia. Mis libros, por fortuna, la tenían antes y la han seguido teniendo después.

E.S: Al leer sus novelas, tengo la sensación de estas viendo fotogramas de una película, no leyendo capítulos de un libro ¿Es usted un escritor hecho para el cine?
A.M: Tengo una imaginación muy visual, creo yo, porque me gusta el cine y me gusta mucho la pintura, y también porque disfruto mucho mirando las cosas y la gente. Pero la condición cinematográfica de cualquier texto literario depende casi en exclusiva del talento visual del director y de la capacidad del guionista.

E.S: En sus novelas, no faltan los personajes oscuros, ya sean violadores en serie,  mujeres bohemias abandonas en los excesos ¿ Sufre cuando dibuja estos perfiles? ¿Qué pasa cuando se deja el teclado y vuelve a su rutina? ¿El personaje le persigue por los pasillos de casa?
A.M: Los personajes se quedan en los libros, afortunadamente. Y lo mejor de algunas de las mujeres que hay en mis novelas está inspirado casi siempre en una mujer de la realidad que vive conmigo.

E.S: Según su opinión, ahora mismo, ¿Se están haciendo cosas interesantes, literariamente hablando, en España?
A.M: Claro que sí. Muchas, no siempre las más reconocidas.

E.S: En nuestro programa, hemos tenido a un escritor (Marcos Alonso) que ha escrito su primera novela a 6 manos con personas que no conocía. Si a usted le invitaran a participar en un proyecto de estas características ¿con quién le gustaría compartir esta labor? ¿Quiénes serían sus partenaires en una novela a 7 manos?
A.M.: Los guiones de cine se pueden hacer en colaboración, pero las novelas a mí en particular no me parece que tenga sentido hacerlas a varias manos. Escribir es un acto demasiado íntimo para hacerlo en grupo.

E.S: Y si habláramos de un guión de cine ¿A quién elegiría para que lo llevara a cabo? 
A.M: A Elvira Lindo, que además de mi mujer es una excelente guionista de cine.

E.S: Ahora con su vida en N Y, ¿Qué cosas ha descubierto o  aprendido de la vida? ¿Con qué se queda y que desecha?
A.M: He descubierto que me viene bien ir y venir de España. Me quedo con la capacidad de aprender y de entenderse con los que no son como nosotros. Desecho el fanatismo y el consumo irracional y destructivo.

E.S: En su libro de relatos “Nada del otro mundo” Hay un fragmento del primer relato que dice: "Más vale poco público y muy interesado que lo contrario, que esos salones de actos repletos de gentes y c·maras de televisión en los que el novelista deja de serlo para convertirse en vedette". ¿Cuándo deja el novelista  de serlo, para convertirse en algo que no quería? Cuando eso ocurre ¿es mejor tocar retirada?
A.M: En el cuento eso lo dice un personaje que no soy yo, sino un escritor bastante fatuo, por cierto, aunque, como habla en primera persona, algunos lectores suponen que transmite opiniones mías. Lo que sí creo es que un escritor cuanta menos vida pública haga mejor para su salud personal y literaria.

E.S: ¿Sigue pensando que la televisión es el opio del pueblo?
A.M: No, pienso como Marx: el opio del pueblo es la religión. Las religiones fanáticas y las ideologías interpretadas religiosamente.


Eternamente agradecidas.