jueves, 7 de junio de 2012

EL RUISEÑOR DEL TECLADO



Hace unos meses atrás
en la biblioteca lo vi entrar,
y con la complicidad de un buen amigo
me susurró al oído:
¡Lo que no quería escuchar!

Es un aficionado a las pelis
y un apasionado de la música,
y digo “ES” porque no se ha ido
porque no lo hemos permitido.
Está en nuestro corazón
y nunca lo abandonará
pues lo consiguió tatuar
con dosis inmensas de cariño.

Tanto su familia como amigos
lo tendremos muy presente
porque es un ejemplo a seguir
para luchar contra los inconvenientes.

Busco a ese señor risueño
que alegraba mis peores momentos,
contándome la última historia o cuento
que me enviaban a la dulce niñez.

Un contador de historias tan peculiar
que mezclaba la picardía en sus relatos
con la clase y maestría de un juglar.

Podías pasarte horas escuchándolo
que no te iba a defraudar,
tenía esos puntos de humor
que al relato lograba encumbrar.

La música era otro dulce cauce
para repartir alegría,
nos tenía enganchados a todos
con el gran repertorio de melodías.
Podías escuchar temas desde los setenta
hasta la misma actualidad,
estudiaba al público primero
y después se dejaba llevar.

Esperamos que los ángeles bailen
con tus dulces y entrañables temas,
nosotros viviremos consolados
porque no sufras más en la tierra.

¡Dulces sueños amigo!
FRANCISCO DÍAZ GONZÁLEZ
¡Nuestro Paco Espino!

                                                                             
                                                         MANOLO ROMERO


No hay comentarios:

Publicar un comentario